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No es rumor ni coincidencia que muchos asistentes a conciertos culpan a las empresas dedicadas a la venta de boletos en exceder en precios exorbitantes que parecería un monopolio y hasta una táctica para pagar más de lo que realmente vale una presentación. Tanta ha sido esta queja a nivel mundial que los gobiernos estan poniendo más atención a estos casos.
El presidente de Estados Unidos Joe Biden anuncia su compromiso de eliminar las tarifas ocultas de las entradas para los conciertos desde la Casa Blanca, con un nuevo compromiso de los gigantes de los conciertos Live Nation y Ticketmaster, así como de mercados secundarios de entradas como SeatGeek, para eliminar las tarifas ocultas en las entradas de los conciertos y, en su lugar, mostrar una. «precio claro y total» para cada boleto, como informó
El anuncio llega cuando la administración de Biden trabaja para eliminar las muchas otras «tarifas basura» agregadas a los costos para los consumidores, desde estados de cuenta bancarios hasta facturas de cable.
El presidente tocó el tema en su discurso sobre el Estado de la Unión en febrero. Ahora, está obligando a los minoristas de boletos de conciertos a instigar los precios con todo incluido sin las tarifas ocultas.
“El presidente Biden ha estado trabajando para reducir los costos para las familias trabajadoras al reducir la inflación, limitar los precios de la insulina para las personas mayores y eliminar las tarifas basura ocultas”, dijo Lael Brainard, directora del Consejo Económico Nacional, en un comunicado, según NBC News.
«Más empresas están prestando atención al llamado del presidente para que los estadounidenses sepan lo que están pagando por adelantado y, como resultado, puedan ahorrar dinero«, agregó el director.
El año pasado, la frustración pública con el aumento del costo de las tarifas ocultas de las entradas para conciertos cobró fuerza cuando los fanáticos de la estrella del pop Taylor Swift informaron sobre precios exorbitantes en sus entradas, sin mencionar la dificultad que enfrentaron para obtener las entradas en general.
En el mundo del rock, Robert Smith de The Cure hizo un ejemplo público de las tarifas adicionales de Ticketmaster a principios de este año cuando pretendía reducir las entradas de The Cure a un costo firme.
Ticketmaster ha mantenido durante mucho tiempo un bastión en la venta de entradas para conciertos en los Estados Unidos. En 2010, el minorista se fusionó con Live Nation, el promotor, para convertirse en una empresa singular.
El año pasado, un grupo de asistentes al concierto de Estados Unidos demandó a Live Nation Entertainment, la corporación que envuelve a ambas compañías, por presuntamente violar las leyes antimonopolio y usar lo que llamaron ventas «depredadoras».
Pero el gigante de los conciertos salió victorioso cuando un tribunal dictaminó que los compradores habían renunciado a sus derechos de demanda a favor del arbitraje según los términos y condiciones de la empresa. Récord de ingresos de Live Nation en 2022.
En la presentación ante la SEC de 2022 de Live Nation, la corporación desglosó sus números anuales y explicó: «Nuestro negocio de conciertos generó $13.500 millones, o el 80,9 por ciento, de nuestros ingresos totales durante 2022. Promovimos más de 43.600 eventos de música en vivo y otros en 2022».
En un pasaje revelador, agregó que «se vendieron aproximadamente 270 millones de boletos utilizando nuestros sistemas Ticketmaster... A medida que aumenta la venta de boletos, los ingresos operativos relacionados con la emisión de boletos generalmente también aumentan».
Aunque esto apenas inicia en Estados Unidos, no dudamos que próximamente este tipo de políticas pongan un poco el freno en el exceso de costos por servicios y cambio de fases de los precios de los boletos en Latinoamérica.
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