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Una de las mayores expresiones del black metal en su lado más vanguardista, es lo que ha hecho de Harakiri for the Sky un nombre de peso en su estilo durante la última década. Coronando un ciclo glorioso de su más reciente lanzamiento Mære (2021), el dueto austríaco se embarcó en su gira más ambiciosa, con Chile marcando una parada histórica, la única en Sudamérica, brindando un espectáculo de intensidad y buen gusto.
Poco más de las 19 horas, el sonido abrasivo de Sol Sistere daría el ‘vamos’ al Sabbath en el recinto de avenida Vicuña Mackenna. Sin duda, una de las agrupaciones más exitosas del estilo a nivel local, culminan por estos días su etapa más imperial hasta la fecha, con el LP homónimo (2021) coronando un paso gigante en el plano artístico.
‘Nothofagus’, ‘Ashes’ y ‘The Narrow Path’ desfilaron con la misma potencia abrumadora que sus versiones en estudio, replicando hasta la médula los paisajes musicales con que, en medio de la metralla implacable, se abre paso la agonía como sentimiento. A destacar, de primeras, el desplante de S. como voz y figura de un conjunto que brilla por su propósito y la solidez propia de los casi 10 años de experiencia y trabajo profesional de nivel astronómico. Todo lo que es Sol Sistere hoy, con el sol quemando nuestra dermis y el dolor consumiéndonos hasta la razón.
Si el corte inaugural fue una de las selecciones de Mære, ‘Stillborn’ y ‘Thanatos’ tendrían el mismo papel por sus álbumes respectivos ‘Arson’(2018) y ‘II: Trauma’ (2016). En ese orden, revisitando un catálogo fresco y, al mismo tiempo, clásico por derecho propio, con la inmediatez de una firma que sorprende en cada esfuerzo.
Aokigahara, su 2da placa, tendría en ‘Burning From Both Ends’ su pasaje más ‘antiguo’, con los orígenes del estilo black-gaze de HFTS encumbrados en el firmamento. Entre su orientación avant-garde y la vena ardiente del black metal, nos sumergimos en los recovecos más profundos de un visaje determinado, con la velocidad y la introspección tomadas de la mano.
El broche con ‘Song to Say Goodbye’, original de Placebo, culmina el debut en suelo patrio con una impresión casi indescriptible. Del paraíso terrenal a la morada de los dioses del mundo prohibido, donde caen y pierden sus almas quienes desafían a las divinidades. En vez de la desgracia, nos encontramos con un sentimiento de liberación hasta la médula. Son los extremos de una pesadilla ardiente, hermanados en el ideal del paso adelante, aún bajo el riesgo de perderlo todo cuando hay todo por ganar. Harakiri for the Sky, sin duda, nos brindó sus virtudes terapéuticas mientras desangraba el cielo santiaguino.
Texto: Claudio Miranda
Fotografías: CQPhotograher
Produce: Spider Producciones